El miércoles 2 de noviembre y tras muchas dilaciones, se constituyó el comité de empresa de Alicante. Como os prometimos en campaña electoral, ya que así nos lo exigisteis, nuestra primera preocupación a la hora de constituir el comité fue la de procurar la máxima unidad sindical. Una postura, por otra parte, que supone el máximo de responsabilidad en estos difíciles momentos en los que se preveen importantes recortes en todos los capítulos que afectan a la empresa.
Para ello, nuestra propuesta dejó de lado cualquier antiguo enfrentamiento. Intentó ser una propuesta generosa al máximo y que buscara el máximo consenso y la unidad de todas las fuerzas sindicales.
Y de verdad que pensábamos que esta propuesta se aprobaría por unanimidad. Por justa, por lógica y por necesaria. Esa fue nuestra propuesta, esa fue nuestra intención y así lo expusimos al resto de sindicatos.
Porque después de conocer las cuentas presentadas por la Generalitat el viernes anterior y en las que se detallaba una reducción para VAERSA de más de 40 millones de euros —una reducción cercana al 35% de su presupuesto— y sabiendo de las enormes implicaciones para los trabajadores que tendría dicha reducción, no tuvimos ninguna duda de que la única postura responsable con los trabajadores era la que habíamos tomado: ir unidos todos dentro del comité y olvidar nuestros intereses propios para defender al conjunto de los trabajadores.
Lamentablemente no todos pensamos igual. Y así, el STAS-IV —aprovechando que CCOO tenía intención de dar su apoyo a la fuerza más votada en caso de que no se llegara a un acuerdo— torpedeó cualquier tipo de pacto de unidad y, con una arrogancia y prepotencia impropias para aquel que tan solo dispone de 4 de 13 delegados electos (igual que la UGT y tan solo uno menos que CCOO), acaparó todos los cargos dejando fuera al resto de fuerzas sindicales. ¿Sorprendentemente? La verdad es que para algunos no.
Desgraciadamente lo que todos queríais, lo que los trabajadores nos exigisteis a todos los sindicatos cuando fuimos a pediros el voto, esa propuesta que, como no podía ser de otro modo, UGT hizo suya, la UNIDAD SINDICAL, no ha podido realizarse porque, según parece, una vez realizadas las elecciones alguna gente olvida vuestros intereses y ya solo piensa en los suyos.
Pero nosotros, y pese a todo esto, vamos a seguir luchando por vosotros y por la unidad sindical. Porque vuestro interés es nuestro interés. Porque NO anteponemos nuestro beneficio propio al de los trabajadores que representamos, que son TODOS los trabajadores, nos hayan votado o no. Y seguro que al final lo conseguiremos porque es lo que vosotros queréis. No tenemos la más mínima duda.
Pues si que estamos bien! A ver si algun montañes lee esto y dice algo!